
Volvemos al desierto esta vez de la mano de una de las peores películas de ciencia-ficción de los años 50. ¿Preparados? Agarrense.
Robot Monster dirigida -es mucho decir- por
Phil Tucker en 1953. Efectos especiales inexistentes, guión inverosímil, montaje catastrófico, malas interpretaciones, atrezzo de risa y sin embargo que divertida e inolvidable resulta.
Ro-Man XJ2 es enviado a la tierra para eliminar todo rastro de vida, aunque ocho personas han conseguido sobrevivir en el desierto.
Se supone que Ro-man el monstruo, es un robot según el título, -se barajaron tantos!; entre otros Monsters From Mars, Monsters From The Moon. En realidad el alienígena es un señor disfrazado de gorila con una mascara de buzo y unas antenas de tv, en la carátula el ingenioso ilustrador ha suprimido la media de nylon que le cubría el rostro por una calavera mucho mas dramática. Lo mas chistoso es que eligieron al actor George Barrows porque era especialista en actuaciones de simio - casi toda la saga selvática de la época- y porque tenía disfraz propio y solo cobraba 40$ al día. Cuatro días de rodaje en un paraje habitual de muchas películas del oeste, el cañón Bronson en California, y un presupuesto que no pasó de los 50.000 dólares. Imaginamos los apuros del robot-humano embutido en semejante traje con las temperaturas del lugar. Momentos culminantes; la máquina de burbujas que realiza los efectos especiales mas sorprendentes del film -en los créditos Automatic Billion Bubble Machine- y la aparición estelar del señor que manipula la maqueta del cohete con la mano, al explotar unas bengalas se ve toda la silueta del técnico en acción, y por supuesto las frases metafísicas shakesperianas del monstruo que al enamorarse de la joven doncella no es capaz de matarla “I cannot, but I must”. Como nota curiosa está la incorporación de diversas secuencias de luchas de dinosaurios pertenecientes a otro film que no viene ni al caso, suponemos que esto y las reiteraciones de planos ayudan a llegar a los sesenta minutos previstos.

La segunda parte de nuestro programa doble de hoy, es un título clásico de la ciencia ficción, con gran presupuesto, a todo color y en Cinemascope de la mano de MGM. Estamos a principios del siglo XXIII y llegamos en platillo volante ya humano, (Crucero de los Planetas Unidos C-57D) a un lejano planeta semidesértico cercano a la estrella Altair. (Altair IV). Forbidden Planet (Planeta Prohibido) 1956 dirigida por Fred McLeod Wilcox, con un jovencito y serio Leslie Nielsen, un atractivo Doctor Edward Morbius; Walter Pidgeon y la bella Anne Francis como Altaira nacida en el solitario planeta, luciendo minifaldas y trasparencias ante una tripulación de señores que han permanecido 375 días sin ver una fémina, viajando por el hiper-espacio. 98 minutos de emoción e intriga asegurada, curiosa adaptación de La tempestad de Shakespeare pero esta de verdad.

El ilustrador tomándose licencias con el tamaño del robot.
Uno de los atractivos de la cinta es la primera aparición en público de Robby, el robot icono mas famoso de la historia del cine, cocinero, chofer, traductor de idiomas, asistente personal y fabrica en miniatura, precursor de tantos que vendrían después, recuerden al Robot B-P de la familia Robinson de la serie Perdidos en el Espacio (Lost in Space) CBS 1964-68, creado por también por Robert Kinoshita, o a la duplicación en la pareja C3PO o R2D2 de Star Wars. Robby seguiría su curso en solitario en otros films como “El chico Invisible” 1957, o diversos episodios de series televisivas.
La película sorprende por su lograda ambientación, el planeta, las ultramoderna casa del doctor o la fábrica de la civilización desaparecida Krell y apreciamos muchos detalles desarrollados en posteriores films, aquel curioso método de trasporte de Star Trek o algunas escenas de Star Wars calcadas del paseo por la enorme central subterránea.

Mi nevera.
No se si alguna vez les conté que soy fan de los retro-robots, tal vez por ver de pequeñito series de Irwin Allen como la mencionada Perdidos en el Espacio o las míticas Viaje al Fondo del mar (1964-68), Tierra de Gigantes (1967-70) y El Túnel del Tiempo (1966-67).

Mi colección.
Etiquetas: Viajes desde el sofá.