xnem

Lugar de encuentro. En un mundo donde cada vez hay mas pasajeros y menos viajeros. Todas las fotografías de este blog pertenecen a su autor, menos aquellas que así lo indican.

11.09.2009

Postaler 59. Las mezquitas.

Yeni Cami ve Istanbul Liman (1789)
Jean-Baptiste Hilair (Hilare)

Yeni Cami and The Porto f Istanvul (1789)
Jean.Baptiste Hilair (Hilaire)
Watercolor on paper 40.5 x 57.5 cm.
Suna and Inan Kiraç Foundation Orientalist Paintings Collection


Istanbul - Türkiye
Haliçten Süleymaniye Camii´ne bir bakis
Viev of the Süleymaniye Mosque from the Goleen Horn

Serasker Kulesi´nden Süleumaniye Camisi ve Türbesi
Max Schmith (?) (W.H. Barlett´ten)

Süleymaniye Mosque and Tomb from Serasker Tower
(Second half of the 19th century)
Max Schimidt (?) (from W.H. Barlett)
Oil on canvas, 73 x 100,5 cm.
Suna and Inan Kiraç Foundation Orientalist Paintings Collection

Yeni Cami.

Uno de los elementos mas característicos del perfil de la ciudad de Estambul y que mas sorprenden al viajero que llega por primera vez, son sus mezquitas. Su gran número y su belleza. Estilizados alminares que remontan el cielo, cúpulas impresionantes, patios enormes de brillante suelo y sus singulares fuentes para el ritual de las abluciones. Aunque no se confundan una mezquita no es -o no era- solo un edificio de culto, en sus complejos arquitectónicos incluyen medreses (facultades), mausoleos, hospitales, cocinas, baños turcos y lugares de acogida para los viajeros, los denominados caravasar o han.

La mezquita Azul la noche del comienzo del ramadán.

Interior de la mezquita Azul, sus constructores trabajaron
posteriormente en las obras de Taj Mahal en la India.

El muecín convocaba a la oración cinco veces al día desde el balcón del alminar, ahora sustituido por curiosos altavoces, en los interiores de enormes y mullidas alfombras impresionan sobre todo sus lámparas circulares muy bajas y la majestuosidad del volumen interior, adornado con textos de hermosa grafía. Lo que mas me impresionó fue la cantidad de relojes de péndulo europeos que hay en los templos, los horarios de oración son complicados y uno debe interrumpir sus quehaceres diarios para acudir a la mezquita, así que supongo les gusta tener controlada la hora en todo momento o tal vez una moda iniciada por los sultanes que coleccionaban todo tipo de cosas curiosas.

La mezquita Azul desde una ventana de Santa Sofía.

Santa Sofía.

También existe un gran número de iglesias bizantinas que fueron reconvertidas en mezquitas, la mas importante Santa Sofía, ahora con la identidad de museo, es decir hay que pagar entrada y no hay culto. Una vez restauradas conservan las dos identidades, sus minaretes y cúpulas rematadas a lo otomano y su carácter cristiano en pinturas y azulejos.
En Santa Sofía pude encontrar una cosa curiosa, algo común desde que los hombres comenzaron a viajar a tierras lejanas, esa peculiaridad de dejar una huella impresa del visitante, graffitis vikingos en los mármoles de la balaustrada del primer piso.

Santa Sofía.

Santa Sofía.

Coda; graffitis.

Es un tema interesante que voy recopilando poco a poco. Quizá los primeros graffitis son prehistóricos, hay muchas pinturas rupestres que son símbolos, tal vez como carteles de aviso; No pasar, Alto!, Propiedad privada y otros mas extraños que podrían ser el típico Yo pasé por aquí. Que otra cosa es un graffiti sino dejar constancia del paso.
Hace unos años hicieron un estudio serio de los graffitis en el templo egipcio de Debod reubicado en Madrid, es interesante saber en que año pasaron determinados visitantes por allí. En uno de los paseos por NYC en compañía del Profesor, nos reimos mucho leyendo los graffitis del Templo egipcio de Dendur –mandado construir por el emperador Augusto 15 a.C- que pieza a pieza trasladaron a una de las grandes salas del Metropolitan. Q, MIRO, MONNOT, Segato, Maruchi, ABDALA MALTESE, PSGORDEO y un tal LEONARDO entre otros, dejaron su firma con mucha paciencia y tiempo libre.
Cuentan que el italiano Giambattista Belzoni, profanador de tumbas y principiante arqueólogo de métodos particulares, abrió una brecha -que aún existe- en la gran pirámide de Kefrén, para acceder a la cámara real y quedó sorprendido que otro profanador, el hijo del mismísimo sultán Saladino ya se le había anticipado en el siglo XII. Suponemos que semejante dato no es posible si no dejó su firma en algún muro.

Santa Sofía.

Metropolitan Museum of Art. NYC.
Templo de Dendur.

Los graffitis en el templo de Dendur.

Mas fotografías de los templos mencionados aquí.


Etiquetas: , , ,

11 Comments:

  • At 1:32, Blogger nancicomansi said…

    AY...lo de los grafittis!! y yo que pensaba que era cosa actual!!!
    Espere...¿Podría ser que hubiera visto en algún documental alguno en la antigua Roma? es que me suena...

    Sigo sin explicarme cómo hacían, con los pocos medios de los que dispondrían, para construir esas moles tan gigantéscas...No había grúas...y las "bastidas", que me imagino de tablones de madera de lo más precario...¿De cuantos metros de alto debían ser? ¿cuantos obreros no debían caerse "cada dos por tres" y romperse la crisma? parece de risa pero no...

    abrazo.

     
  • At 9:17, Anonymous Anónimo said…

    que tarfego maritmo!!
    eso de dejar huellas grafitadas es como incar una banderita en la ... lo que viene a ser lo mismo que hacen los perros en los postes...
    bs

     
  • At 15:40, Blogger nancicomansi said…

    Ya...pero esos antiguos tienen su "aquél"...
    Yo lo que no soporto son los "tags" sin ton ni son, que hay dibujos muy chulos ,dignos de figurar en un museo...

     
  • At 16:21, Anonymous Anónimo said…

    oooppsss!!! se me me olvidó identificarme como anónimo "TA" ahí arriba!!
    bs

     
  • At 18:28, Blogger nancicomansi said…

    Felicidades TA!!!
    "escorpiona" como yo...
    Ya me dijo Xnem que este domingo fué tu cumple, el mio, el 16...

     
  • At 18:44, Blogger xnem said…

    Este comentario ha sido eliminado por el autor.

     
  • At 19:52, Blogger xnem said…

    Repito que quedó fatal.
    La altura de la sala de oración es de unos 43 metros, la cúpula tiene 23 metros de diámetro y el mirador del alminar está a 62 metros, una buena caída.

     
  • At 23:43, Anonymous Anónimo said…

    TA
    ...con el permiso del proprietario de la sala de visitas,quiero dar las gracias a Nanci, pero... serás tu escorpio como yo,pues no por gusto pero, yo naci antes que tu..je je!! estaba segura de que eres escorpio por tantas veces que leí "pasion" en tu pefil del blog... gracias y bs ;)
    por cierto X, has añadido algo a tu post esta tarde o yo no lo habia visto completo antes??a veces me despisto..(cada año más...)

     
  • At 8:09, Blogger TORO SALVAJE said…

    Es curioso el tema de los graffittis, será necesidad de perpetuarse aunque sea con unas letras.

    Saludos.

     
  • At 17:53, Blogger nancicomansi said…

    Ahora que lo pienso (a veces soy de reflejos un poco lentos, la verdad...) El tal AMIRO, por ejemplo....¿Cuanto ratito estaría para "gravar" su nombre? porque una cosa son los "rotus" y los sprays,con los que pintas en un "plís-plas" y otra cosa hacerlo el ¿cincél?
    EL tal señorito tuvo que entretenerse lo suyo...claro que eran otros tiempos, y el "idem" cundía más...

     
  • At 18:29, Blogger xnem said…

    Yo también me pregunto señorita nanci, como harían los graffitis y con qué. Supongo que llevar una navaja en el bolsillo era normal en el siglo XIX y en su predecesor. Hasta pienso en las voluminosas llaves que se gastaban en esa época. Tal vez ese tipo de roca es bastante blanda y no necesita mucho tiempo, pero algunos como el tal LEONARDO debieron de pasar un buen rato al sol del desierto ocupados en su caligrafía.

     

Publicar un comentario

<< Home