Re-leer. (Y disfrutar de nuevo).

Sigue lloviendo, como si el cielo quisiera dejar caer esta semana lo que se olvidó de enviar en el resto del año. Y en días así apetece mucho arrinconarse con un libro.
Estos días he estado haciendo algo que no acostumbro; releer.
Ya saben aquello de que cada vez que leemos un libro lo interpretamos de manera diferente, el libro cambia mientras nosotros cambiamos, además -yo por mi parte- en ocasiones no recuerdo absolutamente nada de la trama de algunas novelas que leí hace mucho, aunque conservo en la memoria las emociones o los fracasos de determinadas lecturas.

He releído la famosa trilogía de Paul Auster, y he re-encontrando al autor que me emocionaba, ya que las últimas entregas -que he ido leyendo cronológicamente a medida que se iban publicando- han sido cada vez menos interesantes.
Luego seguí con lo que me pareció la cuarta parte; “El cuaderno rojo”, aunque cada libro es autónomo, hay personajes que se solapan y sobre todo el espectáculo de su ciudad de fondo.

Y para terminar el primer libro que leí de Alessandro Baricco; “Novecento”, una pieza teatral escrita para el actor, Eugenio Allegri, y para el director, Gabriele Vacis, de la que Giuseppe Tornatore hizo una versión cinematográfica con el título de “La leyenda del pianista en el océano” (1998) protagonizada por Tim Roth y que tengo muchas ganas de ver.

La leggenda del pianista sull´oceano. (5,00)

Y así lo dejamos, que tengo un “Océano mar” entre manos y otro cayendo sin tregua sobre la ciudad, no les cuento como termina el duelo Novecento versus Jelly Roll Morton, “el inventor del jazz”, lean el librito y me lo agradecerán.