El maravilloso mundo del circo 1
En la ciudad de Barcelona adivinamos que viene la Navidad cuando en plazas y descampados empiezan a aparecer como setas, todo tipo de circos.
El mas importante y que cumple su cita anual sin falta desde hace una década, es el circo museo de la familia Raluy. Mas de 75 años en la carretera. En otras ocasiones ya les he hablado de los viajes laborales, la familia Raluy vuelve cada final de año a su ciudad y nos recuerda que el circo no solo es su lugar de trabajo, sino su casa y su medio de transporte. Miles de kilómetros cada año.
Es impresionante ver moverse esta caravana a una velocidad de crucero de 60 kilómetros hora, viajan por el mundo entero, una vez al año son contratados en la lejana isla de Reunión en el océano Indico, muy cercana a Madagascar. Desplazarse por pocas fechas es un suplicio, que los mas pequeños de la familia no ven con mucho agrado, pero seguro que cerca o en su propia ciudad han recalado alguna vez, este verano por ejemplo los encontré en Tortosa en plenas fiestas del pueblo.
Los carromatos que utilizan como vivienda son de época, comprados en cualquier lugar del mundo, restaurados y decorados con grandes imágenes de la historia del circo, profesión que dicho sea de paso es ya de otra época, el Circ Raluy es el de toda la vida, dirigido por los hermanos Lluis y Carlos Raluy, donde participan sus mujeres, hijos, hijas, nietas, cuñados y cada año contratan números nuevos; una trapecista, una domadora con caballo, unas focas, este año unos motoristas intrépidos desafiando la gravedad en el interior de una jaula.
Nunca he visto el rostro de Lluis Raluy sin maquillaje, Lluis -Lluiset- hace de payaso blanco y me contaba el año pasado sus problemas con el Ayuntamiento de Barcelona que no permite trabajar con animales, así que las focas se quedaron nadando en la piscina o descansando en el camión frigorífico.
Continuará.
puesto por xnem @ 9:17
13 Comments:
At 9:58,
Anónimo said…
...que bueno pasarse la vida gitaneando por el mundo sin tener dirección fija... pero los payasos me incomodan con su alegria contratada...y las focas descansando en el camión frigorífico me dan pena, pero es genial!!... y surge una pregunta:
si con la navidad vienen los circos...mmm... Papa Noel viene con ellos??
bs y volteretas...
At 12:27,
Marga said…
El circo siempre me ha causado tristeza, de pequeña me negaba a ir,a pesar de tanto colorido yo veía animales con ojos tristes y payasos que me asustaban...
Pero su vida nómada sí me llamaba la atención y respiré tranquila cuando descubrí que podía ser titiritera... eso sí que me gustaba!!
Besosssssss con hatillo
At 14:03,
María said…
Recuerdo haber ido al circo dos veces. La primera de ellas creo que era Nochevieja, y supongo que me gustó, aunque no recuerdo nada, sólo que me alegré mucho cuando la hermana de mi padre me llevó de vuelta con mis abuelos maternos. La segunda vez fuimos porque mi tío compró entradas para todos. El año pasado mi tía quería que fuera pero a última hora, no sé por qué, me eché atrás. Tal vez fue porque ese circo no me dio muy buena impresión y no quería estropear la imagen que, a falta de recuerdos más sólidos, yo me había formado en la cabeza.
At 20:50,
amelche said…
No me gusta el circo, a pesar de haber crecido con los payasos de la tele. Pero admiro, como Marga, su vida nómada y la libertad
At 23:39,
xnem said…
Creo que Los Payasos de la Tele amelche, poco tienen que ver con el mundo del circo, aunque en esa época lo popularizaran en los medios, al final en sus horas mas tristes intentaron sacarle un poco de partido en la carretera pero poco mas, ellos venían de América pero una vez murió Fofó la cosa fue de mal en peor, aunque su “nanonainoooo” es famoso eso si.
At 2:27,
Reaño said…
Lo cual quiere decir que la navidad es un circo?
Por aquí, Alan García baila "La vida es un carnaval"...
At 9:02,
if said…
Nunca me gustó el circo. Debía de ser la única niña que se enfadaba cuando la llevaban. En el circo había animales y olía mal. Nunca me gustaron los animales, aunque en este mundo de lo políticamente correcto (odio esa expresión) te miren mal cuando lo dices.
Como siempre, rarita. Y no lo hago a propósito, soy así.
At 13:25,
Nanny Lidia said…
a mi papa le gustaban los circos y recuerdo de chica haber ido a varios, para es una emocion tan grande ya gente estan glamorosa y misteriosa , siempre que veo un circo me quedo pensando en miles de cosas. Muy lindo post espero la continuacion.
besos
At 20:46,
g. said…
.....al igual que marga y alguien que por ahí he leido, detesto los circos, me dan frio, angustia y muchísima tristeza. Son una metáfora absoluta de ......enfin. Que hasta el primer libro que he publicado transcurre en un circo...es largo este tema para mí, enfin....besos profesor.
At 20:59,
SAFIRO said…
Mientras leía, recordaba cuanto le gustaban a mi padre los circos, creo que nos llevó a los circos más importantes que llegaron a Buenos Aires.
Pensaba eso, sin saber que mi hermana (Nanny)lo escribía desde la otra punta del mundo.
Ya no hé visto circos de tal magnitud. Me gustaba ver la caravana de carromatos, no así las jaulas con animales, sentía mucha pena por los osos.
y particularmente, no me gustaba ir, me daban miedo los trapecistas, los equilibristas...
Creo que nunca lo dije...y mi padre seguía llevándome.
Un abrazo
At 21:23,
MaLena Ezcurra said…
Si, definitivamente la cara de los payasos me da tristeza.
Quizas el maquillaje, que se adentra en sus arrugas.
Aun no lo se.
Maravillosos trompe lei.
Abrazos.
At 21:38,
xnem said…
G lo se, lo mío tambien son las metáforas; los volcanes, los desiertos,los faros, los circos, los cactus...
Safiro! así que nanny es tu hermana. Lo siento no me di cuenta, como es el mundo blog! casi como el mundo real.
malena; la risa y la tristeza son caras de la misma moneda y a veces paralelas.
At 17:38,
Portobello said…
Hola Xavi, gracias por tus avisos, porque ando un poco liada, buscando casa propia y eso.
Veo que te has prepardo tres buenos artículos sobre el circo. He de confesar a mi, no se porqué, me produce una tristeza enorme el mundo del circo, y procuro no acercarme mucho, porque caigo en una melancolía que no me la explico. Tal vez forme parte de uno en una vida anterior...
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