Comer en Roma.

Como muchos sabrán, los viajes a Roma son bastante económicos, el paquete avión-hotel es aceptable. El problema es cuando llegas y te enfrentas a los italianos y sus precios. Estoy seguro que hay un precio para locales, otro para habituales y otro para turistas. No acostumbran a colocar listas de precios en ninguna parte y si lo hacen pueden tener trampa. La bistecca va a peso, 5 euros cada cien gramos, lo que uno no piensa uno es que le pondrán un pieza de 800 gramos!
Primera premisa; intentar comer en locales donde comen los romanos, no los turistas.
Los primeros problemas fueron a la hora del cambio, en algunos lugares se demoran, no solo entre primer y segundo plato, que pueden ser veinte minutos, sino a la hora de pasar a recoger el dinero de la cuenta, con la intención que dejes el resto de propina. Si te quejas ellos protestan mas.
Así que gracias a nuestra manía de recorrer los mas pequeños callejones, encontramos nuestro restaurante, muy cerca del Parlamento, Trattoría dal Cavalier Gino, ¡que lugar! como en casa, buen precio, buena atención; grape, limoncelli y liquorice caseros gratis.
La decoración es kitch como a mi me gustan, sin miedo a pasarse, ni a quedarse corto, así que fue el lugar ideal para probar le fiori di zucca; flores de calabaza fritas. Y le ficci con prosciutto; higos con ese jamón italiano, pomodori secchi; higos secos con el buen aceite local. Y por supuesto un plato típico de la ciudad, la tripa romana; como unos callos pero muy suaves. Entre nosotros, parece ser que lo típico romano es la casquería, así que aún quedan algunos restaurantes cercanos al antiguo matadero que elaboran estos típicos platos.

Trattoria dal Cav. Gino
Vicolo Rosini 4. 00186 Roma.
Cuccina Casereccia e Vini Pregiati.
Chiuso la domenica. No credit card.

Y se respira mediterraneidad.

In vino veritas por supuesto.

También encontramos otros lugares aceptables, L´Arcano cerca del Panteón, y varios lugares típicos en el Trastevere, comimos pizza, polpo, piccata di vitello, bistecca a la griglia y a la Fiorentina (un día es un día), bebimos todas sus cervezas, y los excelentes vinos toscanos.

Una recomendación, si tienen costumbre de beber cerveza con las comidas, una botella de buen vino, sale mas a cuenta que cuatro cervezas de la spina.

Hoy para terminar, recordar que hubo una época en la que los cantantes italianos circulaban por las radios y televisiones hispanas como por su casa.
Rita i la pappa col pomodoro.
Dice; “la historia ha demostrado que un pueblo hambriento hace la revolución”.

Y un vídeo donde se comprende porque la muchacha llegó a ser tan popular.
Ufa! que fiera!